El de hoy es de esos post con los que he disfrutado como una enana viendo las imágenes una y otra vez. Sobre todo porque muestra como decorar una casa guiándote por tus instintos, o lo que es lo mismo, por tu color favorito. ¿Porqué tienes que dejarte seducir sólo por modas y tendencias, cuando puedes aplicar tu propia personalidad a tu espacio más privado" 

Algo así pensaron los dueños de esta casa emplazada en Cape Cod (USA), cuando remodelaron el interior de una casa anticuada y oscura para convertirla en un lugar de descanso para el verano. Se hacía imprescindible dotarla de luz y espacios abiertos y adecuarla para una familia con tres hijos porque originalmente sus dependencias eran estrechas y carecían de la suficiente luz.
Sobre un lienzo blanco se aplicaron  pequeñas dosis de un radiante amarillo que desprende una enorme vitalidad. Lo que más me gusta es como a partir del color que se escoge, se consigue unificar todos los ambientes sin llegar a resultar excesivo, sobre todo tratándose de un color que aplicado con exceso tiende a cansar. Y también, tengo que decirlo, porque es mi color favorito, y me encanta verlo aplicado con tanta elegancia en espacios que transmiten una gran sensación de relax, de frescura, de pasión por el sol, la luz y el verano.

Vía: Style Carrot

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